San Andrés de Giles, AR
domingo, junio 29, 2025
overcast clouds
4 ° c
95%
13.24mh
100%
2 c 2 c
lun
1 c 1 c
mar
1 c 1 c
mié
2 c 2 c
jue
Ciudad

“No voy a parar hasta trabajar en el Barcelona”

Emiliano Bustos, en el Camp Nou.
El gilense Emiliano Bustos, profesor de educación física y entrenador de fútbol, continúa su experiencia en Europa. La vida en Barcelona, un arranque con el pie izquierdo y sus sueños fueron algunos de los temas durante una entrevista exclusiva en el Camp Nou. También habló de la diferencia cultural respecto a los argentinos y los deseos a futuro para nuestra ciudad.IC: ¿Cómo surgió esta posibilidad y qué viniste a hacer a Barcelona? El 16 de abril cumplí 3 meses en la ciudad. La idea empezó por una empresa de fútbol, mandando curriculum. Tuve la suerte de ser seleccionado, de poder venir, de trabajar en 2 clubes y, a la vez, obligar a capacitarme. Los clubes son Castelldefels (la ciudad adonde viven Messi y Suárez, entre otros), que es como la ”C” de Argentina, y el otro la Escuela de Tecnificación del Espanyol de Barcelona, donde tuve la suerte de trabajar con chicos de 4 a 12 años. En Castelldefels pasé por todas las edades. Inferiores y luego, como les gustó mi forma de trabajar, terminé trabajando con la Primera.IC: ¿Cómo fue tu llegada? ¿Tuviste algún inconveniente?La primera semana pensé que estaba en Argentina (se ríe). Tuve la mala suerte de que me robaran. Llegué un lunes y el sábado me tuve que ir a los partidos frente a las Inferiores del Barcelona. Una experiencia hermosa, llegué muy contento y me encontré con que el departamento donde estaba alojado estaba dado vuelta. Me robaron algunas pertenencias. También todos los títulos de profesorados y cursos estaban en el piso, por suerte no se los llevaron. Tuve una mala experiencia  de entrada.IC: ¿Hay mucha diferencia con Argentina en las formas de trabajar en el fútbol de Inferiores?Sí, hay mucha diferencia. Sinceramente, es el día y la noche. Son dos metodologías de entrenamiento muy distintas. Por un lado, desde lo económico está mejor el argentino en referencia a lo que se paga en el fútbol infanto juvenil  que el de acá. Esa fue una gran desilusión al llegar aquí, no lo voy a negar. Los sueldos son bajos, entonces si no estás en un club catalogado muy grande es complejo poder quedarse. Después de eso, tenés todo a favor. Lo que es infraestructura y materiales es impresionante. Por otra parte, la organización también se destaca. Acá se trabaja con 2 o 3 profes y no más de 20 chicos. Cada uno con su pelota, material, etc., no te falta nada. No hay nada improvisado: acá si no tenés título no trabajas.IC: Teniendo en cuenta las malas actitudes de algunos padres en Argentina, ¿cómo es la disciplina de ellos acá?No es al extremo de la Argentina, pero me llamó la atención que son bastante complicados. El “cabrón” se escucha a cada rato. Sobre todo, veo a los padres muy empecinados con los árbitros. En los clubes en los que he estado,  el día de los partidos es muy tranquilo. Es más, el único incidente que tuvo el club Castelldefels lo hizo un argentino. Acá es otra la educación. Sí te van a gritar, te pueden hablar, pero con mucho respeto. Es muy difícil que pase al extremo como en Argentina.IC: Te saco del fútbol y te pregunto por la ciudad, ¿qué tal es Barcelona para vivir?La verdad es que no me quiero ir más. Es asombroso por donde la mires. Tenés todo en un poco radio. Yo estoy en una zona bastante céntrica que se llama el Hospitalet de Llobregat, donde haces unos metros para un lado y tenés la playa, otros para el otro lado y tenés montañas. Medios de transportes habidos y por haber. Si bien hay una multiculturalidad tremenda, se vive con mucha paz, mucha educación y respeto. En Argentina se apuesta primero al fútbol que a la educación y acá es al revés, se apuesta primero a la educación y ese trabajo se ve reflejado en el fútbol, en la conducta: en el estadio hay una paz terrible, hinchas entremezclados y no pasa nada. Eso es porque se apuesta mucho a la educación. Acá, el docente de escuelas públicas y privadas está muy bien pago. Es más, gana más el docente de escuela pública que el de privada.IC: ¿Cómo te recibieron los catalanes?Me habían comentado que eran muy fríos los españoles y los europeos, pero la verdad es que me encontré con algo totalmente distinto. Quizás por la personalidad que tengo, de a lo mejor ser más cara rota, de ser más entrador, de hablar y no tener vergüenza. Pero me han ayudado muchísimo, me abrieron muchas puertas que pensé que no me iban a abrir, están pendientes, me ofrecen cosas, me invitan a comer. Al estar lejos de la familia, por ahí ellos lo ven y tratan de que no pase sobresaltos y picos de melancolía al estar lejos.IC: ¿Le darías algún mensaje a la gente de Giles?Primero, quiero mandarles todo mi cariño a mi familia, mis hijos y mi señora, que es de oro y me banca en todas las locuras. Sin una mujer así uno no podría hacerlo. Darle un consejo a la gente de Giles, no sólo a los jóvenes sino también a los adultos: no tengan una visión conformista, muchas veces veo que estamos estancados, hablo desde mi profesión porque lo he vivido, que nos conformamos con poco y que nos damos la cabeza contra el techo muchas veces. Me gustaría ver un Giles que aspire a más, que su gente, desde el rubro que le toque, intente capacitarse continuamente, no parar, no sólo ser un trotamundos sino intentar dar lo mejor ahí. Yo quiero volver y encontrar una ciudad que me sorprenda desde el crecimiento, de encontrar grandes profesionales, de gente que se preocupe por estudiar, que termine un curso y siga otro. Los quiero invitar a todos a que aspiren a crecer a más. No quiero ser soberbio, sino que lo digo con la humildad que uno tiene y lo que le ha pasado en el rodaje: yo en mi ciudad aposté todo.  Lamentablemente, a veces  te tenés que ir porque no se aspira a más y no se valoran muchas cosas que a lo mejor harían bien a la ciudad. Yo siempre soy un eterno agradecido a Giles, siempre tuve este pensamiento, pero lo hago por el bien de la ciudad, por nada más. Es porque quiero ver a todos creciendo.IC: Por último, ¿cuál es tu sueño y tu meta acá en Barcelona?Nunca lo había dicho y me vas a sacar la primicia (se ríe). Mi entorno lo sabe: yo vine con la idea de trabajar en el Barca. Ya dije que no me voy a ir hasta entrar. No voy a parar hasta serlo. Se dará o no, pero uno va abriendo puertas e intenta demostrar con calidad humana y profesionalismo para cumplir el sueño. No hay imposibles. Los límites se los pone uno.

Otras Noticias ►

Alerta amarilla en Giles por fuertes vientos
El sueño de un chico de barrio
Clasificar al Mundial: El objetivo del taekwondo local
Running: gilense se destacó en los 25K New Balance
Día de la bandera: el por qué de esta fecha tan especial
El IPS firma un convenio con la UTN
Noche de Dúos, un encuentro folklórico imperdible en el Centro de Cultura
Profundo dolor: falleció María Eugenia Lopez
La oficina de Datos continúa capacitando al personal municipal