Entre los jóvenes de San Andrés de Giles comenzaron a circular varias cuentas de Instagram que se dedican a escrachar y exponer supuestas infidelidades. “Bardo Giles” o “Bardo Gilense” comenzaron siendo cuentas de poca trascendencia, pero con el tiempo fueron creciendo en seguidores y hoy son las causantes de conflictos y peleas en las escuelas secundarias. Ciberacoso, bullyng y mensajes de odio que llegan demasiado lejos.

Al buscar en Instagram estas cuentas, aparecen más de 50 perfiles. Estas páginas, que nadie sabe quién las administra, son creadas con el fin de exponer, insultar e incitar al odio entre los jóvenes. “Mandá sin miedo”, “acá es todo anónimo, ustedes me cuentan algunas situaciones o algo y yo lo subo y etiqueto a la persona”, se lee en las descripciones de estas cuentas.

La rapidez de las redes potencia el daño y hace que pronto se viralice entre los jóvenes de nuestra comunidad. Esto termina causando conflictos dentro de las escuelas. Muchas de las peleas entre alumnos de secundaria surgen en las redes, fuera del horario escolar, y terminan desencadenando amenazas, acoso y violencia física dentro de las aulas.

Esta problemática despertó la preocupación de autoridades educativas y familias de nuestra ciudad. Sucede que luego de estos escraches, muchos adolescentes se angustian y comienzan con actitudes evasivas como el encierro que terminan desencadenando una profunda depresión. Los docentes y las familias están trabajando el tema para intentar prevenir estos mecanismos entre los adolescentes, que sin medir las consecuencias, siguen creando este tipo de cuentas.

¿De qué se trata el ciberacoso y cuáles son sus consecuencias?

 El ciberacoso es un hecho que atraviesa a toda la población en el uso de aplicaciones, redes sociales y medios de comunicación digital. Es la intimidación que puede sufrir una persona a través de internet. En estos casos, los medios digitales son utilizados para molestar y acosar a través de ataques personales, divulgación de información privada o falsa.

Según los especialistas, más del 60% de los usuarios que navegan en Internet, fue testigo o sufrió algún tipo de acoso, abuso o intimidación por medios digitales. Esta práctica implica un daño recurrente y repetitivo sobre una persona, la cual puede sufrir angustia y en algunos casos extremos, este tipo de situaciones ha llevado a depresión e intentos de suicidio.

¿Cómo prevenirlo?

Sin duda las redes sociales modificaron la forma en la que nos relacionamos. Así como podemos hacer amigos y hasta encontrar pareja de formas que antes eran impensadas, también el bullyng y el acoso se abren paso en esta era de hiperconectividad.

Lamentablemente, los mecanismos de seguridad y de denuncia que ofrece Instagram quedan escasos a la hora de controlar estos mensajes que incitan al odio. Aunque la cuenta pueda ser denunciada, vuelven a abrirse otra, y el problema se expande aún mas. La única solución está en concientizar para prevenir. Es fundamental hablar mucho con los jóvenes para que reflexionen y entiendan las consecuencias que genera el ciberacoso.