El 19 y 20 de noviembre se llevó a cabo la cuarta edición del Festival de Artes Interdisciplinario “EnPampArte”. Bajo el lema “ArteEnElClub”, esta novedosa iniciativa local con entrada libre y gratuita reunió a más de 100 artistas gilenses y de la zona. Al recordar los inicios de EnPampArte, Agustín Adesso -quien es parte del equipo organizador del festival- comenta: “La propuesta empezó algunos años atrás con una serie de exposiciones de cuadros en el evento Revival, con esa necesidad de encontrar un espacio y acercar las artes visuales a todos. Esta es la cuarta edición en formato festival organizado por nosotros. Vamos creciendo todo el tiempo”.La evolución de este año en particular estuvo dada de la mano de una institución de renombre como el Club Victoria. “Uno de los planteos que hicimos inicialmente es entender el arte de otra forma. Nuestra idea primigenia fue hacer una serie de festivales: Toda la carne al asador, La mesa está servida y Buen provecho. Esta trilogía la realizamos años anteriores en el Complejo Museográfico. En ese momento, implementamos un montón de cambios en ese lugar: nos adueñamos de los espacios, tratamos de aportar lo nuestro y de que ahí quede algo, dejar nuestro valor agregado. Trabajar en el Club Victoria era una idea que teníamos desde hace tiempo. Es uno de los mejores lugares de Giles por su disposición y amplitud”, cuenta Andrés Provenza, quien también es integrante de esta agrupación artística. La idea de intervenir el club, este año, cobró forma. Tal como señala Andrés, tanto el equipo de EnPampArte, los protagonistas del festival y los referentes de la institución quedaron muy satisfechos con el trabajo realizado. “Hoy en día los clubes se dedican mucho a lo deportivo y se pierden de vista otras cuestiones que son fundamentales. Es importante vivir el club desde otros lados y revalorizar esos espacios”, reflexiona Provenza. En relación a esto, Agustín destaca que “es importantísimo dar vida a esos espacios, que muchas veces están muertos, y que sin embargo son lugares maravillosos abiertos a toda la comunidad”.Esta cuarta celebración sin dudas dio a conocer cuán maravillosos pueden ser los espacios como el Club Victoria. Durante los dos días del festival, el nutrido público disfrutó de diversas presentaciones artísticas que incluyeron: música, cine, danza, literatura, cine y artes visuales. Entre los participantes se destacaron: Vale Cuatro Tango (grupo musical integrado por Luis Chiurco, Sebastián Rocha, Martín Campissi, Oscar Campissi y Emilia Basaldua), Ataca Bacatá (conjunto conformado por tres músicos colombianos y dos argentinos, entre los que se encuentra el gilense Manuel Daverio), Lunarias (grupo local que reúne expresiones teatrales, musicales y de la literatura), y El Gurú, quien estuvo a cargo del cierre del festival, entre otros.“Queremos darle lugar a las expresiones artísticas y darle valor a las instituciones. Nuestro horizonte es sensibilizar a la sociedad”, resalta Adesso. En la amalgama de manifestaciones culturales desplegadas quedó en evidencia que el objetivo de la cuarta edición se vio superado con creces. “EnPampArte es un juego de palabras sobre el contexto, sobre el lugar, nuestra pampa húmeda. Es una especie de búsqueda sobre lo que somos, acerca de si existe una identidad propia del pampeano. Nos damos cuenta de que personas, artistas que jamás se cruzaron están pensando lo mismo, dan mensajes similares, van por lugares parecidos. Todo esto lo compartimos acá y eso está buenísimo”, agrega Agustín.Por su parte, Andrés no duda en remarcar que se ve un crecimiento sostenido año tras año. “La gente se va apropiando del festival, lo espera. Eso nos hace bien porque sentimos que quieren participar, se amplía el espectro de artistas y el público se acerca. Vamos mostrando un camino y dándole un rumbo a la propuesta. En esta edición eso quedó clarísimo”. Agustín añade que la intención del equipo es continuar con esta iniciativa: “Se trata de devolverle al pueblo lo que el pueblo nos dio. También buscamos la ruptura de prejuicios, incentivar a la gente a que se arrime, se anime a abrirse a lo distinto, a lo que por ahí no vio antes”. Tal como concluye Andrés, el fin es “revalorizar el arte como una manifestación profunda de la realidad. Es fundamental que tanto la sociedad, como las instituciones, las empresas y los profesionales acompañen estos espacios que necesitan del apoyo de todos para seguir creciendo”.No caben dudas de que la cultura es la sonrisa que brilla en todos lados. León Gieco le puso la firma a este verso y así fue que se vivió el último fin de semana gilense: a puro fulgor empapado de arte.