La mostosierra del presidente Javier Milei arrasó con las valiosas becas Martha Argerich que impulsaban a talentosos y jóvenes músicos de todo el país. Lamentablemente este recorte a la cultura también afecta al joven de nuestra ciudad Octavio Paulino, quien fue becado a comienzos del 2023 por su talento y dedicación con el bajo.

La prestigiosa pianista argentina Martha Argerich escribió una carta abierta sobre la decisión del presidente Javier Milei de cerrar el programa de becas que lleva su nombre. “Si el Estado no apoya y contribuye a la cultura, el futuro es realmente peligroso”. Las becas de apoyo a estudiantes están destinados a integrantes de orquestas infantiles y juveniles para que se desarrollen como profesores de música.

Las becas, explicó la artista, deberían haberse reiniciado en febrero, algo que no sucedió. Además, la pianista expresó su malestar porque a la mitad de los profesores del Programa no les renovaron el contrato. En total fueron 12, de un cuerpo de profesores de 25, los que recibieron un mail con la comunicación de su despido, siendo cuatro de ellos jóvenes que habían recibido la beca durante 2021-2022, y que habían empezado a dar clases en 2023.

La carta completa de Martha Argerich

La situación local de la Orquesta Arroyos y Sembraderos

En este contexto de desfinanciamiento, hablamos con el exdirector de la Orquesta Arroyos y Sembraderos de nuestra ciudad, Pablo “Bebe” Hormachea. Su testimonio refleja la angustia y la impotencia de quienes se han visto afectados por estas decisiones. La orquesta, era parte del programa Andrés Chazarreta de Cultura de la Nación. “Esto nos afecta directamente porque nosotros hace mucho tiempo venimos trabajando en el estudio y el crecimiento de nuestros alumnos. A medida que van egresando, tienen la posibilidad de participar de esta beca. Hace un año tuvimos la posibilidad de tener un ganador, representante de San Andrés de Giles, que es Octavio Paulino. Él tuvo la suerte de estudiar un año entero recibiendo la beca, muy comprometidamente. Esto a nosotros nos daba la esperanza de que Octavio sea docente de nuestra orquesta. Si bien somos dependientes del municipio de San Andrés de Giles, esta capacitación y esta beca, que le da dos años de estudio, lo avalaba para enseñar a los alumnos que recién inician. Él podría haber enseñado de la manera que aprendió”.

Lamentablemente esos planes y sueños por ahora han quedado en pausa. “El programa se bajó directamente, lo cerraron, no tiene fondos. Entonces los alumnos dejaron de tener clases, no se activó de nuevo la beca, y eso generó un poco de desánimo en todos los compañeros, en el mismo alumno Octavio, y obviamente como director me siento muy afectado emocionalmente sobre esto. Así que bueno, nada, recurrí al municipio, quien nosotros somos dependientes, y tampoco tuvimos una respuesta favorable”, asegura Bebe.

Además del desmantelamiento de programas y becas, la orquesta local también ha enfrentado obstáculos en la entrega de instrumentos prometidos. A pesar de los reclamos persistentes, los instrumentos no han sido entregados, lo que representa otra señal preocupante del descuido y la falta de compromiso hacia la cultura por parte de las autoridades locales. “A raíz de nuestro trabajo en el concierto de Tecnópolis en el que participamos en septiembre del 2023, tuvimos la suerte de recibir nuevos instrumentos, los cuales llegaron a San Andrés de Giles pero nunca nos fueron entregados, nos corresponden para que sigan estudiando e ingresando más alumnos”.

Es un momento complicado para alumnos, becarios y docentes de las orquestas infantiles y juveniles. Acerca de esto, Bebe explica que a nivel local también enfrentan “la falta de docentes y la falta de compromiso del municipio de San Andrés de Giles, que no nos vuelven a contratar nuevos docentes, para que puedan cubrir los espacios que están vacantes, como guitarra, algo tan simple como guitarra, acordeón, violín. Entonces, como director, me pongo la orquesta al hombro, y doy todas las clases junto con el profesor Maxi Arzani, y la profesora Liliana Bao, que viene una vez a la semana. Entonces, estamos en un momento de incertidumbre, desorientados, pero bueno, no queremos bajar el ánimo para seguir adelante con la cultura que tanto nos hace falta para seguir creciendo con las orquestas infantiles y juveniles de temprana edad”.

Reviví su gran actuación en Tecnópolis el año pasado