Los incendios de pastizales siguen azotando a San Andrés de Giles, y la sirena de los bomberos no da tregua. En promedio, los bomberos se enfrentan hasta tres incendios por día, con picos críticos como el del 10 de enero, cuando se registraron ocho servicios en un solo día. La situación, alarmante, no muestra signos de mejora, a pesar de los esfuerzos de las autoridades.
El pasado viernes, el área de ambiente municipal, junto con Bomberos Voluntarios realizaron una conferencia de prensa para alertar a la población sobre los riesgos derivados de la sequía prolongada y las altas temperaturas. Hicieron un llamado urgente a la responsabilidad de los vecinos, solicitando evitar las quemas no autorizadas, ya que muchas de las emergencias son prevenibles.
Además, las autoridades pidieron solidaridad, recordando que cada intervención de los bomberos implica un importante desgaste de recursos, materiales y una sobrecarga en la institución, que está trabajando en turnos adicionales para hacer frente a la creciente cantidad de incendios. El cansancio físico y los sobreturnos son una constante entre los voluntarios, que se ven obligados a atender emergencias con recursos limitados.
Pese a las recomendaciones y el llamado de realizada atención, los incendios continuaron durante todo el fin de semana, y las condiciones climáticas de esta semana no son alentadoras. Las altas temperaturas, que superan los 35 grados, seguirán siendo un factor agravante durante los próximos días. Según el Servicio Meteorológico Nacional, no se esperan lluvias significativas hasta el viernes a la madrugada, cuando se prevén tormentas aisladas para la región.
La comunidad de San Andrés de Giles enfrenta una situación crítica, y el compromiso de todos es esencial para prevenir incendios que podrían empeorar aún más las condiciones actuales.
De octubre a marzo, son meses donde los incendios forestales se propagan con mayor frecuencia en diferentes puntos de nuestro país. El accionar humano, el cambio climático, la deforestación son factores en los que aumentan este tipo de situaciones.
Cabe destacar que las bomberas y bomberos voluntarios de todo el país cumplen un rol fundamental a la hora de atacar los focos ígneos dado su nivel de capacitación, capacidad operativa y experiencia. En efecto, según el Registro Único de Bomberos de Argentina (RUBA), en el año 2022 los bomberos voluntarios intervinieron en más de 43.000 incendios forestales en todo el país.
Varias provincias de nuestro país, están siendo afectadas por incendios forestales y los bomberos voluntarios se encuentran trabajando para extinguir los focos ígneos. Los Incendios Forestales son fuegos que se propagan sin control, sin importar su origen, que afecta a bosques, llanuras, pastizales, pasturas, entre otras destrozando no sólo la vegetación, sino muchas veces especies de animales que habitan en ese lugar.
La sequía y las altas temperaturas de esta época del año elevan los índices de peligro de los incendios forestales y las consecuencias suelen ser devastadoras. ¿Cómo prevenirlos?