El músico Eduardo Puyelli arribó esta semana a San Andrés de Giles, para dirigir un show experimental llamado (des) Concierto, que se desarrollará a partir de las 19 en la Biblioteca Juan Bautista Alberdi. Participarán siete músicos, dos locutores y una artista plástica.
La creación del desConcierto
Si bien Puyelli es oriundo de nuestra ciudad, desde hace algunos años vive en Trevelín, Esquel, provincia de Chubut. El espectáculo del 27 nació el año pasado, a partir de”Paisajes Sonoros Esquizofónicos” , una propuesta creada el año pasado junto a Carlos Lopez Victorel, que constaba de combinar audios de distintos músicos para generar una especie de “zapada virtual“.
“Ahora lo que vamos a tratar de hacer es construir en el momento, lo que construimos en diferido. Va a ser todo en el mismo momento, pero va a haber un hilo conductor. Siempre los Paisajes buscaron que los textos afirmen lo que nosotros no podíamos decir con la música sobre arte, filosofía; sobre todo lo que te inquieta pensar” explica Eduardo.
En el evento del domingo actuarán los creadores de los Paisajes Sonoros Esquizofónicos; los músicos Carlos Lopez Victorel, Natalio López, Marcelo Ferraris, Federico Chebriau, Juan Del Río y Sebastián Cirilo y la artista plástica Silvana Vignati. Julia Michelón y Lucas Carrizo serán los responsables de las lecturas del show.
El arte como puente
La familia Puyelli se encuentra viajando por el país desde el 6 de enero, cuando partieron de Trevelín a bordo de “Caburé“, un camión Mercedes Benz que desde entonces se transformó en su nuevo hogar. El viaje surgió en el marco del proyecto “Tocando Pueblos“, una iniciativa que se propone conectar distintos puntos del país a través de conciertos didácticos en escuelas.
“La convivencia la vamos llevando genial. Ya hemos hecho viajes en una Kangoo, en los que estuvimos un mes y medio sin carpa. Por eso nos animamos a hacer el viaje este, porque sabíamos que no íbamos a tener inconvenientes.” – confiesa el músico – “La meta era llegar a Giles para el domingo, y arrancar acá con el proyecto de Tocando Pueblos“.
Al momento de salir, la familia había programado que después de visitar nuestra ciudad, se dirigirían rumbo al litoral. Cuando estaban en pleno viaje, los incendios forestales llevaron a Corrientes a una de las peores crisis de la historia. Sin embargo, esto no fue excusa para modificar el plan de viaje: “si sirve que vayamos a un lado que la sufrió, vamos. Porque la verdad es que no estamos buscando un viaje de placer y lindos paisajes“.
Y en este sentido, Puyelli relata: “tenemos ganas de que pase lo que está pasando, que estamos conociendo gente a través de la música. Por ejemplo, en Madryn nos golpeó la venta un señor que era poeta y nos recitó algo que le había escrito al agua, por los dibujos que tenemos en el Caburé“.
El camión fue bautizado de esa manera, en honor a un ave patagónico que le dio el nombre a la calle en la que vive la familia viajera. Por ese motivo, sobre el lado izquierdo del vehículo hay un dibujo del animal. Además, en la parte derecha del Mercedes Benz se puede ver a la Cordillera de los Andes, acompañada de los colores de la Whipala andina.
“Todo lo que hemos pintado, en cierta forma nos representa. Lo del agua tiene que ver con que desde que llegué a Esquel, conocí el movimiento ‘No a la Mina’ y estuve ligado siempre a ello. Siempre hay un movimiento, siempre hay que estar atajando, para que no se traicione la voluntad del pueblo y se instale la megaminería. Nos pareció que era una cosa que teníamos que llevarla. Encima en el viaje te das cuenta que el agua vale más que todo, porque en muchos pueblos no se puede toma el agua potable. Y eso mucho no se ve, lo mismo que con los incendios por la sequía o los agrotóxicos” declara el artista.
Y concluye: “los dibujos nos ayudan a encontrar gente que está metido en eso como nosotros. Por eso te digo, no es un viaje de vacaciones, es un viaje de aprendizaje. La idea es conectar con esas otras realidades que allá, lejos, no estamos viviendo“.