Con la llegada de las altas temperaturas, se hace necesario prestar más atención a nuestras mascotas, para protegerlas de los golpes de calor. A través de su página web, el Instituto Veterinario Doctor Romero sostiene: “los perros definitivamente sufren el calor mas que la gente, pues los mecanismos humanos para paliarlo no son tan eficientes en ellos. El perro no transpira y por lo tanto no se ‘moja’. Así, necesita intercambiar calor de alguna manera y lo hace jadeando. Pero el jadeo tiene un límite de eficacia“.
En este sentido, agrega que es necesario no molestar al perro, ofrecerle una buena sombra y agua. “Para nosotros los veterinarios la patología ‘Golpe de calor’ es una tragedia. Una vez desatado, frenar la cascada de acontecimientos internos que se producen, es muy difícil” explican desde la institución. Para evitar esto, es crucial evitar los paseos en horas pico.
Desde la Fundación Affinity, organismo que brega por la unión entre personas, perros y gatos, declaran que la mejor manera de cuidar a los felinos consiste en respetar diez puntos:
Y por último, estar atento a algunas señales. En el caso de que esté por sufrir un golpe de calor, “el gato puede ponerse nervioso, empezar a jadear, salivar en exceso, resultar caliente al tacto, temblar, tambalear, vomitar y sus encías pueden aparecer de un color más oscuro e intenso de lo normal. En casos graves, el gato puede desmayarse e incluso morir“.