El estado de los caminos que unen a las localidades del partido de San Andrés de Giles con la ciudad cabecera es preocupante. Esta situación no es nueva, sino más bien un problema que parece no tener solución a corto plazo.Cucullú es uno de los pueblos que sufre la desidia en su Acceso 9 de Julio, arteria clave para comunicar a los vecinos con la Autovía 7. Este es el único camino que por asfalto se puede llegar al centro gilense.Familias, trabajadores, transportistas y visitantes usan el camino diariamente. Durante el día se mezclan peatones, bicicletas, motos, autos, camionetas, micros y camiones. Incluso, hasta vecinos que hacen deportes y maquinarias agrícolas por allí transitan.Este combo de cuatro kilómetros de extensión se transforma en un peligro teniendo en cuenta el estado de la cinta asfáltica. Pozos y más pozos aparecen a diario a pesar del trabajo que realizan los empleados municipales de la localidad tapándolos con los materiales que tienen a mano. El camino necesita un trabajo de fondo.Detenerse unos minutos a contemplar el camino es visualizar un sin fin de maniobras en “zig zag”, conductores esquivando pozos como si se trataran de “chicanas” en una pista de carreras. Muchas veces se escuchan las frenadas de algunos automovilistas que se vieron obligados a reaccionar ante algún imprevisto o alguno que está al costado del camino examinando una nueva rotura de su móvil.El problema vial es contundente en una arteria muy transitada. De hecho son varios los antecedentes fatales a lo largo de la historia, sin embargo, el panorama no cambia. Más pozos e iluminación precaria que se complica aun más con el humo de las hornallas que a veces se mezcla con la niebla de la madrugada.La comunidad de Cucullú siempre reclamó y planteó soluciones. Desde una bicisenda para garantizar la seguridad de peatones y ciclistas, hasta solicitudes formales por el estado de la calzada que no llegaron a mucho. A pesar del esfuerzo, el camino sigue siendo de los olvidados.Según figura en el archivo de Infociudad, la Municipalidad había acordado re-acondicionar el camino con la firma que hizo el primer tramo de la AU. 7 por nuestra ciudad: Cartellone S.A. Pero cuando todo terminó, la empresa juntó sus cosas y en la mudanza nadie le exigió el trabajo.Hace poco, el intendente Puglelli le entregó al hoy gobernador de Buenos Aires, pero en aquel momento candidato, Axel Kicillof, una “hojita” con necesidades de la ciudad. Allí estaba el acceso a Cucullú. Habrá que ver si esa gestión es prioridad para la intencia y provincia o si termina una vez más en el abandono, como la obra de la escuela del pueblo que ya es prácticamente una ruina.