


En una entrevista radial en FM Libre esta mañana, el intendente Miguel Gesualdi se refirió a la crítica situación económica que atraviesa el municipio, detallando una abultada deuda con proveedores y explicando las medidas que se están tomando para administrar la crisis. En principio un ajuste y reordenamiento de los números en todas las áreas.
El jefe comunal fue contundente al dimensionar el deficit: 980 millones es la deuda a proveedores que tiene el municipio. Gesualdi aclaró que esta cifra es dinámica debido al funcionamiento diario del municipio, donde se contraen nuevas deudas mientras se cancelan otras. Además explicó que actualmente el municipio tiene un déficit de 3 mil millones de pesos, que se gastaron por fuera del presupuesto previsto para este año.
Frente a la tensión con los proveedores, algunos de los cuales han cortado servicios, el intendente reconoció la situación: “Así como nosotros estamos en una situación complicada, los proveedores también”. Explicó que el origen del problema radica en un contexto nacional complejo, donde “aumentaron los costos en general, en el rubro que quieras, aumentaron exponencialmente y la recaudación, tanto la que viene de coparticipación como la local, ha bajado”.
Además señaló que esta es la situación de al menos 90 municipios bonaerenses de los 135 municipios totales que tiene la provincia. Varios de ellos ya se han declarado en emergencia económica.
Al definirse como un administrador de los fondos públicos, Gesualdi fue claro sobre los límites de su gestión: “Si no tenés nada o tenés poquito, poco podés hacer”. Sin embargo, enfatizó una postura firme respecto al empleo municipal. “Despedir gente no lo podés hacer, yo no despediría gente”, afirmó, marcando distancia con las políticas del Gobierno Nacional.
La estrategia, en cambio, pasa por una reducción natural de la planta. Reveló que entre 8 y 10 personas se jubilaron recientemente y que el número de 868 empleados bajará en neto entre 4 o 5, ya que “algunos hay que tomar” en áreas sensibles como salud o donde se requiera personal calificado. El plan es no reponer la mayoría de los cargos y reacomodar el personal existente entre distintas áreas para optimizar los recursos humanos sin recurrir a despidos.