Con cámaras en mano y mirada curiosa, los pequeños alumnos del taller fotográfico “Ojos de Campo” se embarcaron en un proyecto para descubrir, retratar y poner en valor la identidad del campo que los rodea. La iniciativa, llevada adelante por la profesora Micaela Rodriguez, combina la fotografía con material audiovisual, disponible en las redes sociales del taller, donde los propios niños se convierten en narradores de sus tradiciones.
En diálogo con Infociudad, la docente detalló los objetivos y el espíritu del proyecto que lleva adelante con sus alumnos. “Es un trabajo que arrancamos ya en abril, que lo titulamos Miradas Rurales. La idea es poder registrar fotográficamente todos los elementos que componen a la ruralidad”, explicó.
El proyecto aborda diferentes elementos icónicos del paisaje y la cultura del campo. “Comenzamos con el alambrado, ahora estamos con el molino, la idea es continuar con las bombas de agua, los aljibes, después seguir con el gaucho, sus costumbres, el mate, la vestimenta, el caballo, sus animales también”, enumeró Micaela. El propósito final es claro: “Buscamos también rescatar y valorar lo que forma parte de la identidad de nuestro pueblo… y también reflexionar sobre la importancia del cuidado del campo, de preservar las costumbres, y bueno, también transmitir esto a las nuevas generaciones”.
La idea del proyecto surgió casi sin querer durante las clases de fotografía. “Cuando generalmente daba la clase de macro fotografía todos los años, iban a hacer fotos a las torniquetas. Y cuando les preguntaba cómo se llamaba, no sabían ni qué era ni para qué servía”. Ese desconocimiento de elementos propios de su entorno fue el motor. “Entonces, entendimos que no solo se trata de ir a sacar fotos, sino aprender de la ruralidad que nos rodea”.
“Miradas Rurales” trasciende lo fotográfico para incluir una parte audiovisual y educativa. Micaela, destacó que también cuentan con la colaboración de Loli Riera, profesora de Teatro de Villa Ruiz. “Los chicos son además los que filman, los que aprenden el uso del micrófono, lo que están delante de la cámara, los que se expresan desde la oralidad. Va más allá también de la parte fotográfica, es bastante amplio el proyecto”.
Este proyecto demuestra que Ojos de Campo no solo enseña técnica fotográfica, sino que utiliza el arte como una herramienta para conectar con sus raíces, documentar la ruralidad, y asegurar que las nuevas generaciones conozcan y valoren la cultural rural de su pueblo.