Las fiestas de fin de año son momentos de celebración, pero también pueden convertirse en un riesgo para la salud si no se toman las precauciones necesarias al preparar y consumir alimentos. Por eso, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) comparte una serie de recomendaciones clave para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos (ETAs) y garantizar una celebración segura para todos.

Factores de riesgo en verano

Las altas temperaturas, el traslado inadecuado y la manipulación incorrecta de alimentos son las principales causas de intoxicaciones alimentarias en esta época del año. Para evitar riesgos, es fundamental prestar atención a cada etapa de la preparación y conservación de las comidas.

Consejos prácticos para preparar alimentos seguros

1. Lavado de manos y superficies: Antes de cocinar, lavarse las manos con agua y jabón durante 40-60 segundos y desinfectar las superficies donde se manipularán los alimentos.
2. Agua potable: Usar agua segura tanto para el lavado de alimentos como para el consumo.
3. Cocción completa: Asegurarse de que las carnes, pescados y huevos estén bien cocidos.
4. Evitar temperaturas riesgosas: No dejar alimentos a temperatura ambiente por más de dos horas. Refrigerar los perecederos a menos de 5°C y mantener las comidas calientes a más de 60°C hasta el momento de servirlas.
5. Separación de alimentos: Utilizar utensilios distintos para alimentos crudos y cocidos, y mantenerlos separados durante su almacenamiento.
6. Cuidado con el descongelado: Nunca descongelar alimentos a temperatura ambiente. Optar por hacerlo en la heladera o utilizando métodos seguros.
7. Control de etiquetas: Revisar siempre el rotulado y la fecha de vencimiento de los productos antes de comprarlos.
8. Transporte seguro: Comprar productos refrigerados o congelados al final de la compra y transportarlos adecuadamente para evitar que se expongan al calor o al sol.

La importancia de la prevención

Las enfermedades transmitidas por alimentos no solo generan molestias como vómitos y diarrea, sino que en algunos casos pueden derivar en complicaciones graves, especialmente en niños, adultos mayores y personas con sistemas inmunológicos debilitados. Por eso, es responsabilidad de cada uno extremar los cuidados y garantizar que las comidas compartidas en estas fiestas sean seguras para todos.

Con estas medidas simples pero fundamentales, podés disfrutar de una mesa festiva sin comprometer la salud de tu familia y amigos.