El búnker de Unión por la Patria de calle Rivadavia casi Saavedra fue uno mientras se esperaban los resultados y otro desde que comenzaron a llegar. Las caras reflejaban que los comicios no estaban cumpliendo las expectativas que se tenían, el intendente interino Miguel Gesualdi esperaba más. Mucho más. Si bien el triunfo lo posiciona como candidato para octubre, los números no son definitorios.
Para entender el porqué de esta ausencia de alegría o preocupación generalizada, hay que ir a la historia. Desde 1983 a la fecha se llevaron a cabo 11 elecciones a intendente de manera interrumpida. En todas, excepto en una, el triunfo del ganador fue por un porcentaje mayor al que sacó Gesualdi.
Según la aplicación oficial Elecciones 2023, Gesualdi cosechó un 42,79% de los votos. Solamente superó a la elección del recordado Luis Ghione, mentor del oriundo de Necochea, que en 2007 renovó con el 34,8% de los votos. En esa elección, el radicalismo se dividió entre Carlos Ortega y Aldo Nascimbene, al no haber PASO, el Dr. Ghione se quedó con el triunfo.
En 1983, el radical de Cucullú Julio Rossi ganó con el 49,9% de los votos en lo que significó la vuelta de la democracia. En 1987, el radicalismo siguió gobernando con el triunfo de Aldo Nascimbene con el 48,4%. Luego, también ganó en 1991 con el 47,3%; en 1995 con el 45,3% y en 1999 con el 49,9%.
Ghione cortó la racha radical con el 48,2% en 2003; en 2007 logró la antes mencionada hazaña; y en 2011 se lució con un 60,8% de los sufragios. La continuidad estuvo en manos del joven contador y peronista Carlos Puglelli que logró el 53,3% en 2015 y el récord histórico del 63,5% en 2019.
Sobre este punto hay dos miradas. Es cierto que Unión por la Patria no logró posicionarse a nivel local. El gobernador Axel Kicillof logró el 32,1% y la dupla Sergio Massa – Juan Grabois sumó 25,9%. El corte complicó indudablemente.
Sin embargo, hay que destacar que la campaña del peronismo gilense fue casi 100% local. Desde la cartelería hasta las producciones en redes sociales con el slogan “hicimos”, pusieron a Gesualdi en el centro de la escena restando importancia a la totalidad del frente.
En 2019, donde Puglelli dio su última función, logró sacar más de 20 puntos que las boletas nacionales y provinciales de su partido; en cambio Gesualdi ronda en el promedio de los 10.
Correcto es también mencionar que con distintas estrategias, la elección de Miguel Gesualdi es la más baja de un intentendente en funciones de la región. Iván Villagrán en Carmen de Areco logró el 47,8%; Juani Ustarroz en Mercedes ganó con el 48,6%; Leo Boto en Luján alcanzó el 54,6% y Diego Nanni el 43,8% en Exaltación de la Cruz. Todos ellos también representando a Unión por la Patria. En San Antonio de Areco, Francisco Ratto con Juntos por el Cambio sacó el 44,7%.
Con estos resultados el HCD cambia completamente. Unión por la Patria colocaría 3 ediles de los 5 que renueva, Juntos por el Cambio 3 de los 2 que renueva y La Libertad Avanza logra 1 representante. Así, el oficialismo a pérdida en una elección ejecutiva y con un volumen menor de concejales (6 UP, 7 JC, 1 LA).
En el Consejo Escolar pasaría algo similar. Unión por la Patria renovaría 2 de los 3 consejeros escolares que tiene; mientras que Juntos por el Cambio sumaría uno. Todo quedaría en parda entre los dos partidos (3 JC, 3 UP).
Por primera vez en muchos años, el oficialismo mira de reojo lo que pasa en los otros frentes. La diferencia de 8 puntos con Juntos por el Cambio obliga a las dos principales fuerzas a sacar sus buenos dotes de pescadores. Ambos deberán sumar volumen.
Seguramente una opción será el padrón de no votantes ya que participó el 71% del total. Se prevé que entre un 5 y un 7% más pueda votar en octubre si se compara con elecciones anteriores. Los otros votos en disputa serán los de la Libertad Avanza a nivel local, ya que la boleta de Augusto Bianchi fue la más cortada de manera negativa. Es decir, sacó poco más de la mitad de los votos que obtuvo Milei. Aunque este último puede tener la suerte del “caballo ganador” por la buena elección nacional del libertario.
El peronismo hoy sabe que es el principal candidato a retener la Municipalidad otros cuatro años, llegando al récord de 24 años gobernando el mismo proyecto. Aunque, necesita sumar más adhesiones para no quedar debilitado ante la comunidad y reforzarse en los ámbitos legislativos.