Nicolás Gobetti tatuó a un crack italiano campeón del mundo
Redacción Infociudad
Gobetti con Materazzi.
9 de julio de 2006. Italia y Francia empatan 1 a 1 en el minuto 110 de la final de la Copa del Mundo llevada a cabo en Alemania. El cansancio ya se nota en los 22 que están en cancha, nadie esperaba mucho más. Los penales iban a definir la historia.Pero el deporte más popular siempre sorprende. Zinedine Zidane, el rey del juego lírico de la época, discute con Marco Materazzi. El 10 se da vuelta y le estampa un cabezazo en el pecho que quedará en la historia. El árbitro, Horacio Elizondo, el argentino de las finales, se apoya en una pantalla gigante del estadio -premonición del actual VAR- y expulsa al astro. Esa secuencia recorrió el mundo.Decir que Materazzi es reconocido por eso, puede sonar a insulto si repasamos su carrera. Pero esa situación, sin dudas, lo hizo aún más popular. El italiano terminó ganando esa Copa del Mundo, pero antes ya había conquistado con el Inter de Milán una Liga de Campeones de la UEFA, dos Copas de Italia, dos Supercopas, una Copa de Europa y cinco Scudettos.Esta semana el defensor ya retirado de las canchas apareció por Argentina, su hijo mayor cumplió 18 años y le hizo un pedido muy especial: “quiero conocer la Bombonera”. La visita se hizo realidad, vieron el superclásico, estuvieron con Diego Milito en las inmediaciones del Cilindro de Avellaneda, comieron un asado con Daniel Osvaldo, quien lo acompañó a la cancha, y se despidieron con un broche de oro: ¡un tatuaje de Boca! Tanto Marco como su hijo Davide decidieron estamparse en la pierna el escudo Xeneize para llevar con orgullo a su país.Tatuaje con impronta gilense“Me escribió a las dos de la mañana del martes por WhatsApp ¡Era Materazzi! ¿Entendes? Quería el escudo de Boca y ese mismo día se lo hice” le cuenta Nicolás Gobetti, el tatuador gilense, a Infociudad.Nico es un artista de renombre, ganador de importantes concursos y con una mano especial que ya dejó huella en importantes figuras del deporte y la cultura. El joven gilense hizo una carrera maratónica que no deja de sorprender.“Marco es un tipo muy humilde, imaginate que quería venir para acá cuándo hablamos” cuenta hoy Nicolás. La foto del tatuaje, y del gilense realizándolo, hoy recorre el mundo. Los principales medios se hicieron eco de la noticia.El tatuaje.