Esta mañana la Policía resolvió un caso con ribetes insólitos. Un granjero denunció que le estaban desapareciendo huevos de su producción y fue la fuerza local quién terminó descubriendo al autor material.Según pudo averiguar este medio, los faltantes en la granja –ubicada cerca del casco urbano y la RN. 7– se hicieron notorios en el último tiempo. Los huevos de las gallinas ponedoras eran escasos en la cuenta del propio titular, por eso se encendió su alarma.La Policía recibió la denuncia, ya que el dueño comenzó a sospechar de un móvil delictivo, y empezó a investigar. Luego de revisar la situación, los efectivos locales esclarecieron el caso: el ladrón estaba dentro de la granja.Al parecer un empleado oriundo de Misiones, que se inició en la empresa recientemente, robaba los huevos para comercializarlos en un local gilense. Con el paso de las semanas las docenas fueron crecieron y el tráfico de huevos comenzó a dar sus pequeños frutos.Tras confirmar el modus operandi, la Policía decidió actuar contra el ladrón. En el operativo para confirmar las sospechas se secuestraron cerca de 40 maples de huevos y otras contundentes pruebas. Ahora el sujeto tiene una causa por hurto.El “Ladrón de huevos” fue atrapados con las manos en la masa, mejor dicho, en la yema. Ahora el granjero podrá aprovechar la totalidad de la producción.