El año comenzó con cambios en una de las instituciones más importantes de San Andrés de Giles: la Liga Local de Clubes. El director de este medio y representante de Táchira en el fútbol gilense, Gonzalo Ifrán (28), fue elegido presidente de la organización, una gran responsabilidad. En total son 25 los clubes/equipos participantes, más de 600 los jugadores y alrededor de 15 personas las que perciben un salario por prestar servicios (árbitros, seguridad, administrativos). Ese conjunto es el fútbol que Giles fue creando.En diálogo con Infociudad, el director se puso el saco de presidente para hablar de lo que será su gestión y hacer un balance de los últimos cuatro años de esta nueva organización.InfoCiudad: Entre tantas actividades, ahora tenés una más: la Liga Local de Clubes ¿Cómo fue tu designación?Gonzalo Ifrán: En realidad desde el 2014, cuando los clubes se organizaron en una asociación sin fines de lucro para llevar a cabo el fútbol local, estoy colaborando. Me tocó participar activamente en la presidencia de “Pepín” Liendo y luego en la de Carlos Avalos. Ellos marcaron un camino que ahora nos toca continuar.Este año nos planteamos renovar las autoridades y en acuerdo con los delegados de los equipos participantes se armó la comisión que estará dos años. Por suerte me toca integrar un grupo de gente que tiene muchas ganas de trabajar por nuestro fútbol. Así es más fácil sin dudas.IC: ¿Qué cosas van a cambiar en la liga ahora?GI: En realidad mucho no va a variar. La Liga Local de Clubes inició un proceso de organización con “Pepín” y Avalos muy importante, son dos personas a las que respeto mucho y tuvieron en su momento el valor para ponerle criterio y seriedad a un torneo que es de todos. La idea de la nueva comisión es continuar ese camino pero corrigiendo aquellas cosas que los mismos participantes nos piden cambiar. No es fácil conformar a todos. Pero esta organización siempre se caracterizó por definir sus cuestiones democráticamente con el voto de los delegados. Nadie impone una idea, ni el presidente ni un funcionario. Esta receta nos permite reflexionar y debatir sobre nuestro fútbol sanamente.IC: Igualmente vimos ya algunos cambios, la página web, un nuevo torneo…GI: Bueno sí, la página web es una herramienta fundamental para que todos estén al tanto de lo que ocurre en cada reunión, cómo están las finanzas, las estadísticas, etc. También decidimos crear secretarías en la CD para garantizar un mejor funcionamiento. Hay personas encargadas de los asuntos económicos y legales, la seguridad, el arbitraje, delegar nos hace más eficientes en lo que hacemos.El nuevo formato del campeonato (Serie A, Serie B y Copa) es algo que se votó en 2017 y nosotros fuimos puliendo con la confección de los reglamentos y otras modificaciones. En su momento Miguel Lobo, delegado de Apolo, fue quien trajo la idea a la mesa y prendió. A mí me encanta, como a los delegados que la votaron. Ojalá tenga un buen funcionamiento.IC: ¿Sentís que a veces a la Liga se la desprestigia hasta desde el entorno de los mismos participantes?GI: La liga es una institución importante que reúne a más de 600 jugadores y le da trabajo a 15 personas entre árbitros, seguridad y personal administrativo. Hay pocas organizaciones que manejen esos números en Giles. Jugar a la pelota es un derecho, es un divertimento, nosotros lo que hacemos es poner las normas y el trabajo con una sola premisa: que lo puedan practicar todos.No creo que se desprestigie, sí que los que jugamos a veces lo hacemos con más “liviandad” que cuando somos parte de otras organizaciones. Tal vez por una cuestión de competitividad. Necesitamos el apoyo de todos los clubes y del estado para que esto siga funcionando, no podemos perder la alegría de esta disciplina. Hay que trabajar para mejorarlo día a día, es una cuestión social.IC: El arbitraje es un tema polémico en la Liga ¿Es la crítica reiterada?GI: Puede ser que sea una crítica reiterada, pero no estoy seguro que siempre pueda ser vista con objetividad. Cuando el árbitro nos favorece nos vamos callados, cuando perdemos nos quejamos de ellos y sí se equivocó ni te cuento. El árbitro se va a equivocar como cuando el 9 erra un mano a mano, el arquero calcula mal o el 2 habilita a todos. Siempre nos vamos a equivocar. Pifian los de primera que son profesionales y ganan otro dinero. Hay que tener paciencia y ayudarlos para que puedan estar tranquilos. Al árbitro hay que protegerlo.IC: Hablaste hace poco de que necesitan del apoyo del estado y de otros clubes ¿A qué te referís específicamente?GI: Cómo a cualquier vecino se le hace difícil llegar a fin de mes, a nosotros también se nos complica para organizar el fútbol. Por eso necesitamos unir fuerzas, porque entre todos es más fácil. Cada uno debe aportar desde su lugar, nosotros tenemos que dar garantías de que podemos hacer nuestra tarea bien, y los clubes y el estado tienen que acompañar desde adentro. La Liga la hacemos todos.Después sí hay otras cosas que son el ideal, pero necesitan de un trabajo mancomunado más profundo y planificado. Por ejemplo es inconcebible, que clubes grandes de Giles aun no tengan campos de entrenamientos. ¿Alguna vez nos pusimos a pensar lo que hay detrás de clubes como Victoria, Villa Manchi y Cucullú entre otros? No es solo dar una camiseta. Hay chicos a los que se le da calzado, una copa de leche, se los lleva a otros lugares para que puedan divertirse. El club es su casa y los profes son sus ejemplos. Los dirigentes hacen lo imposible pero a veces no tienen las condiciones. Y lo que digo es solo una parte ínfima de lo que hay detrás. Por eso se necesita planificar para que estas personas que realmente se ocupan de un tema social importante tengan mejores condiciones. Pero bueno, ese es un debate que todos debemos dar.IC: Por último, ¿La CD se puso objetivos concretos para estos años?GI: Sí, queremos regularizar nuestra situación legal con la personería jurídica, para eso conformamos una secretaría específica. Vamos a tratar de fijar un reglamento que se respete a largo plazo (por lo menos 4 años), queremos mejorar el servicio que se le brinda a los equipos participantes y llevar a cabo algún mini campeonato de fútbol infantil que nos permita poner una semilla que con el tiempo todos debemos trabajar para que florezca. Esto último no se hace de un día para el otro.