Por lo general, los gestos definen a una persona o un grupo conformado por varias. Hay de los buenos y destacables y otros que ni siquiera valen la pena remarcarlos. La historia que a continuación se describirá es de los primeros; es de esos gestos que marcan a un grupo de chicos (o no tan), que los califica como uno que se preocupa y pretende aportar desde su lugar un granito de arena para crear una sociedad gilense más unida, comprometida, consciente, respetuosa y memoriosa.El grupo de alumnos de 6to. año de Economía y Administración del Colegio Nacional es al que se hizo referencia anteriormente. El año pasado, en el marco de la materia Gestión Organizacional, dictada por la Profesora Fernanda Vigor, presentó el proyecto social llamado “Una Estrella, Una Vida”, al Concejo Deliberante que consistía, según palabras de una de sus impulsoras, Valeria Rodríguez, en “pintar estrellas amarillas en las rutas o calles donde falleció gente de Giles por un accidente vial para que las personas tomen conciencia, más que nada en nuestra ciudad, que es un pueblo chico, y cuando un vecino fallece afecta a toda la comunidad”.Rodríguez sostuvo que “la idea es que la gente que no conoce la zona, por ejemplo el cruce de las rutas 7 y 41, al ver la estrella diga ´uy, acá falleció alguien, es una zona peligrosa, vamos a bajar la velocidad´ y también recordar a las personas que murieron; es un proyecto social del Colegio”.El proyecto, agrega la alumna Daiana Prieto, está inspirado en la campaña “Estrellas Amarillas”, que es a nivel nacional y consiste también en pintar sobre el pavimento o dibujar en un cartel al lado del camino una estrella amarilla como homenaje a los que ya no están pero también para que sirva como una señal de alarma, un llamado a tomar conciencia. (Ver “Campaña Estrellas Amarillas, el modelo”)Previo a enviar el proyecto al Concejo, los alumnos salieron a las calles con folletos y a preguntarle a los gilenses qué les parecía la idea. También hicieron encuestas y juntaron firmas para llevarlas, junto con una carta, a los concejales y que éstos vean cuántas personas estaban de acuerdo. La tratativa desde el Concejo demoró, pero finalmente decidieron darle curso en noviembre de 2016 mediante una ordenanza municipal. Rodríguez aseguró que “los concejales dijeron que estaba bueno para tratar de que no haya tantos accidentes, en especial de gente joven”.Cuenta Prieto que durante el armado del proyecto y después de que el Concejo lo haya aprobado, los alumnos se fueron comunicando y fueron recibiendo mensajes de familiares de las víctimas en la página de Facebook que crearon (Una Estrella, Una Vida) que querían interiorizarse en el tema y colaborar, y también pidiendo que pinten una estrella por su ser querido que falleció. Daiana agrega que “los familiares tuvieron buenas reacciones, obviamente no hablan con alegría, pero aceptaron y se unieron al proyecto”.Hoy se pintó la primera estrella en nuestra localidad. “Pintamos en la esquina de Quintana y San Martín la de Johana Ayelén, una joven de nuestra ciudad que perdió la vida en un accidente el 7/9/2010. Luego, tenemos dos más y seguramente después se irán sumando. Nosotros somos los encargados de pintarla y, si los familiares lo desean, también se puede poner el nombre de la persona debajo. Yo creo que es una buena idea para recordar a la gente y para que se tome conciencia”, dice Rodríguez, quien además no se olvida de nombrar a las otras profesoras que guían a los alumnos en este proyecto: Selva Ferraris y Araceli Lena.La ordenanza plantea que el Municipio colabore con los materiales necesarios para pintar la estrella, como los pinceles y la pintura. También, dice Prieto, tienen que pedir el corte de calles, ya que cada vez que se pinte una va a haber gente invitada. Para el caso de que tengan que pintar alguna estrella amarilla en alguna de las rutas, van a tener que pedir el corte de la misma, situación que quizás se pueda complicar un poco más.Para finalizar, los alumnos coincidieron en lo que les produce llevar adelante esta iniciativa junto al Colegio: “es lindo que la gente tome conciencia, que tomemos conciencia todos y que no sigan pasando los accidentes viales fatales en nuestra ciudad”. Sin dudas, el gesto de este grupo es digno de resaltar y valorar. Un gesto, como quien dice, cinco estrellas. Campaña Estrellas Amarillas, el modeloEl proyecto de los alumnos del Colegio Nacional toma como modelo una campaña que nació a partir de la iniciativa de un papá que perdió a su hija en un accidente de tránsito. Se trata de Julio Ambrosio, quien luego del fallecimiento de su hija Laura Cristina, decidió crear en abril del 2008 la Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel, que tiene como uno de sus objetivos primordiales trabajar en la concientización vial. En ese momento, comenzó a gestarse lo que hoy se conoce como la “Campaña Nacional de Concientización Vial Estrellas Amarillas”, conformada no sólo por los integrantes de la Fundación, sino también por todas aquellas personas de diferentes ciudades y provincias que se fueron sumando por diferentes razones. La Campaña hoy en día está formada por más de 400 grupos distribuidos en todo el país.La Estrella Amarilla funciona como símbolo característico de la campaña, pero no tiene una única función: además de recordar a la víctima, también sirve para despertar conciencia en quien maneja y acompañantes, es un símbolo de atención y de memoria. Hasta el momento, la Campaña lleva pintadas más de 10.500 estrellas amarillas en el país y ya recorrió más de 650.000 kilómetros.La Campaña trabaja con tres aristas principales, dirigidas a todos los sectores sociales: la prevención, la educación y concientización y el acompañamiento.