Un año atrás, Infociudad visitó el barrio El Esfuerzo para conocer las condiciones de vida de sus vecinos. A pesar de haberse constituido como barrio hace siete años, siguen sin luz eléctrica, agua corriente ni desagüe pluvial.En 2010, a través del Programa Nacional de Instituto de la Vivienda, se fundó el barrio de “Autoconstrucción”, denominado por los habitantes como “El esfuerzo” por el sacrificio que les costó levantar ellos mismos sus viviendas. El loteo oficial de los terrenos, donados por Vialidad Nacional, recibió a once familias, en su mayoría desalojadas de la estación de trenes. Según los vecinos, el municipio aceptó que otras familias se instalaran informalmente en lo que restaba del predio, siempre y cuando respetaran la planificación oficial pensada para el lugar.Hoy el barrio continúa sin urbanizarse. A pesar de los infinitos reclamos de los vecinos, el municipio aún no ha instalado el tendido eléctrico oficial. Las instalaciones provisionales de luz son, además de precarias, peligrosas, ya que están al alcance de la mano.La ausencia de zanjas también agrega otro problema al mal estado de las calles. Cada vez que llueve se dificulta el secado y la circulación dentro del barrio, haciendo que salir y entrar sea una odisea, especialmente para los niños que asisten a las escuelas en el casco urbano. Además, la falta de desagüe pluvial empeora la situación de lluvia, haciendo que las inundaciones sean cada vez más frecuentes.El agua corriente tampoco llega a sus hogares. Las vecinas que llevan adelante el merendero del lugar explicaron que prácticamente viven del agua del barrio Gracias a Dios a una presión mínima que viaja cuadras enteras.En la actualidad madres y vecinas del barrio reciben en el merendero a más de 40 chicos del lugar para brindarles alimento y contención. Según las organizadoras, este merendero es uno de los más concurridos de la ciudad, junto al del Barrio San Bernardo.