Cualquiera que haya tenido la posibilidad de realizar el clásico viaje de egresados a Bariloche seguramente va a decir que fue una experiencia única e irrepetible y que hoy, a la distancia, repetiría sin lugar a dudas. Pero no a todos, casi diría que son contados con los dedos de las manos, ese viaje le cambió para siempre la vida o, al menos, el futuro que en ese momento creían que iban a tener. El gilense Matías Campissi es uno de estos casos excepcionales, porque fue en su viaje de egresados, allá por el 2001, cuando conoció bien de cerca una montaña alta que le llamó muchísimo la atención, tan es así que enseguida consultó al guía que le había tocado dónde podía estudiar algo que tenga que ver con eso. Hoy, 15 años después, está a punto de recibirse de guía de montaña, trabaja como asistente de un guía de Luján en las distintas expediciones que realiza y ya hizo cumbre en el Aconcagua. Infociudad se contactó con quien fuera integrante del histórico grupo musical gilense Mama Santa para conocer más acerca de esta actividad.IC: Matías, ¿cualquier persona que quiera puede practicar montañismo?M.C.: Sí, cualquiera puede. Para eso, hay salidas que las llamamos de iniciación del montañismo, que son relativamente cortas, donde las personas duermen sólo una vez en carpas como para que se habitúen y sientan los que es. También vamos a un refugio la primera noche y hacemos todo para que la gente se sienta bien, coma bien y vuelva si le gusta.IC: ¿Cómo debe ser la alimentación y la hidratación durante una salida?M.C.: En la montaña hay que comer bien, es todo un mito que no hay que llevar nada. Por lo general, en montañas de altura necesitas muchos hidratos de carbono y, en menor cantidad, proteínas. También las comidas de marcha, como son las frutas secas. La hidratación es esencial, más cuando estás en una montaña con altura (de 3000mts para arriba). Acá en Argentina todavía podes tomar agua de los ríos de montaña, eso es perfecto. También tomamos jugos y algunas sales de hidratación. Hay una regla que es cada 1000mts. que subís tenes que tomar un litro de liquido.IC: ¿Y la noche en una montaña se sufre o es un mito?M.C.: Es un mito. En realidad, es según las condiciones que te toquen. Tiene que estar todo bien hecho, como decimos nosotros “a prueba de bomba”, para que no tengas ningún problema. Pero la noche en una montaña es increíble, es mágica, ves cosas que no ves en tu vida, las estrellas están ahí nomás. La noche es buena, a veces asusta un poco, pero no pasa nada.IC: Ya tenés varias salidas a diferentes montañas, ¿cuál fue la que más te gustó e impactó?MC: Sin dudas, el Aconcagua. Hacer cumbre ahí fue un sueño. A los 15 años fui al Parque Aconcagua y veía gente bajando con mochilas y decía “¿cómo hacen?”, hasta que un día me encontré ahí arriba con la sensación de haberlo logrado. Previamente fui dos veces con grupos, pero por distintas causas no pudimos hacer cumbre. La tercera fui solo y en 10 días pude llegar. Es la meca del montañismo en ese momento. También tuve las mismas sensaciones en distintas expediciones que se sufrió mucho para llegar, que trabajé muy arduo, como por ejemplo, una vez en Bolivia, que fui desgarrado y con Julián (el guía lujanense con el que trabaja) hicimos en 10 días 5 montañas de más de 5 mil metros en la Cordillera Real. La verdad que la sufrí, pero la hice y me quedó una sensación buenísima.IC: ¿Cómo fue el entrenamiento para poder hacer cumbre en el Aconcagua?MC: Acá en Giles no hay subidas para hacer. Hice mucho gimnasio y también la parte aeróbica, porque son actividades de larga duración, en las que podes estar caminando 8/12 horas por día. Entrené en el puente peatonal, que es la única subida que hay, e hice pasadas con una mochila de 15-25 kg., como para simular la parte de subida y después hice pasadas y entrenamientos de distancia de 10, 15, 20km. Yo fui en febrero, entonces los últimos tres meses estuve a pleno con el entrenamiento.IC: ¿Por qué recomendás a la gente que realice esta actividad?MC: Porque es una actividad no sólo física, sino que es una terapia, es psicológica. Una actividad donde estas en un ambiente que para algunos puede llegar a ser hostil, donde ves cosas que no ves todos los días, tu cabeza se tranquiliza. Además, en la montaña no está esa competencia que hay en otros deportes. “LA MONTAÑA TE HACE REENCONTRAR CON UNO MISMO”Hugo Monsalvo es, quizás, el mejor alumno que tiene Matías. En el 2014 comenzó con el montañismo y, desde ese momento, no pudo ni quiso dejarlo. “En la montaña uno se reencuentra con uno mismo; pone a prueba sus límites y en ella saca lo mejor y lo peor de cada uno”, asegura. Además, coincide con su mentor al decir que “cualquier persona puede empezar con esta actividad, su condición física determinará qué grado de exigencia puede tolerar”. Hugo, que ya hizo expediciones como el Serrata, en Mendoza (4200mts.), el Chañi, en Jujuy (5800), y varios cerros de Catamarca, entre ellos el San Francisco, de 6000m., recomienda esta actividad, entre otras cosas, porque “al estar a distintas alturas tenes la posibilidad de apreciar distintos paisajes, como estar caminando dentro de un nube, o ver la puesta del Sol por encima de ellas”. Tan es la fascinación que encontró en el montañismo que tiene como objetivo hacer el Aconcagua en el 2018. Para consultas y más informaciónMail:pmcmatias@hotmail.comFacebook: Matias CampissiINOUT AdventureJulián Insarralde Trekking & Alta Montaña